Cuantos más idiomas hablas, más fácil resulta aprender un idioma nuevo. Pero hay que empezar por alguno. No te bloquees eligiendo un idioma que sea particularmente difícil. En vez de eso, convierte el aprendizaje de idiomas en una profecía autocumplida, centrándote primero en aquellos que podrás dominar rápidamente. Aquí tienes una lista de los siete idiomas más fáciles de aprender.
Aprende idiomas a tu propio ritmo
El español es un idioma muy conectado: tiene vínculos con muchas lenguas europeas. La estructura, el alfabeto y la composición del español son similares a los del francés, el italiano, el inglés y otras lenguas románicas, lo que, como hablante de español, hace que resulte más fácil aprender estos idiomas.
1. Inglés
Aprender inglés es fácil o incluso muy fácil para los hablantes de español. La ortografía es muy básica, lo que significa que muchas palabras se escriben como se pronuncian. El inglés y el español comparten raíces latinas, por lo que encontrarás muchas similitudes en el vocabulario. Por lo tanto, tanto la pronunciación como la lectura y la escritura te resultarán muy sencillas.
2. Italiano
El italiano es una lengua románica de la familia indoeuropea. Gracias a sus raíces latinas, encontrarás muchas similitudes con el español. Las consonantes y las vocales de esta lengua se encuentran entre los sonidos más comunes en los idiomas de todo el planeta, lo que hace que la pronunciación sea bastante fácil. El ritmo y la entonación del italiano también te resultarán muy fáciles de imitar.
3. Francés
Aparentemente, el francés y el español son muy distintos, pero esto se debe a la pronunciación. Esta será la parte más difícil de aprender francés. Pero descubrirás que en el fondo el francés ha influido mucho en el español: ambos idiomas comparten palabras derivadas del latín.
4. Holandés
El holandés es el tercer idioma germánico más hablado, y si habla inglés, es posible que reconozca algunas de las palabras en holandés. De hecho, muchas de ellas se escriben de forma idéntica, y se diferencian tan solo en la pronunciación. Sin embargo, todas estas similitudes también vienen acompañadas por algunos falsos amigos.
Aprende idiomas a tu propio ritmo
5. Sueco
El sueco es otro idioma que es fácil de aprender si ya sabes algo de inglés. También tiene muchas palabras que provienen de la misma raíz que en inglés. Una gramática sencilla y un orden de palabras similar hacen que el sueco sea fácil. Una gran ventaja son las formas verbales, en su mayoría invariables en sueco, por lo que a diferencia de las lenguas latinas, ¡no hay que conjugar tanto!
6. Portugués
Como hablante de español, deberías ser capaz de coger el sentido del portugués con bastante rapidez. La parte difícil es la pronunciación, por lo que tendrás que entrenar un poco tu oído. Pero el portugués tiene un buen ritmo fácil de seguir. El vocabulario común te ayudará a aprender el idioma, y las grandes posibilidades de practicarlo también te serán de gran ayuda.
¿Qué hace que un idioma sea fácil de aprender?
Hay varios factores que determinan lo fácil que te resultará aprender un nuevo idioma:
– Idioma nativo: Tu lengua materna será tu punto de referencia y siempre harás comparaciones con el idioma extranjero que estás tratando de aprender. Las similitudes, como las palabras que tienen la misma raíz lingüística, hacen que sea más fácil aprender el vocabulario, como es el caso de los hablantes de inglés que estudian francés.
– Habilidades de aprendizaje: Tener un don para entender la gramática, una mente para memorizar el vocabulario, una memoria fotográfica para los caracteres escritos o un talento para imitar la pronunciación, sin duda, es de gran ayuda. Escoge la vía rápida y elige un idioma acorde con tus habilidades particulares.
– Exposición: Como demuestran los niños que crecen siendo bilingües, con la exposición a un idioma extranjero (especialmente a una edad temprana) conseguirás aprender mucho.
– Gramática: Una estructura oracional y un orden de palabras familiar te permiten hacer paralelismos con tu idioma nativo (o con otro idioma, en caso de que hables varios).
– Pronunciación: El lenguaje es comunicación, por lo que hablar es literalmente la mitad del trabajo para dominar un idioma. Una pronunciación que encaje con tus habilidades o que sea cercana a lo que ya te es familiar impulsará tu aprendizaje.
Por último, pero no menos importante, también tienes que ser paciente y mantenerte motivado al aprender un nuevo idioma. Si eres reacio, nada te será fácil. ¡Recuerda siempre por qué estás aprendiendo un idioma para mantenerte centrado!
Aprende idiomas a tu propio ritmo
Jakob es un escritor independiente que vive en Barcelona, España. Como narrador experimentado, publica ficción creativa en inglés y alemán y ayuda a otros escritores a convertir sus manuscritos en historias atractivas. Con experiencia en una amplia gama de temas como la escritura, la literatura, la productividad, el marketing, los viajes y la tecnología, produce contenidos atractivos para sus clientes. Además del escapismo que ofrecen los libros, Jakob disfruta viajando como nómada digital y se mantiene en forma escalando y haciendo senderismo. Descubre más sobre él en su página web, en Twitter o en Goodreads.